¿Qué hay para comer? Ejemplo de una coordinación de parentalidad
El tipo de alimentación que brindamos a nuestros hijos puede ser fuente de conflictos entre los distintos sistemas que le cuidan.
Sandra y Miguel son madre y padre de Raúl..
A Raúl le encantan los fideos con salchichas y cada vez que Miguel, su papá, los prepara se pone muy feliz y pide repetición. Pero Sandra, mamá de Raúl, cada vez que se entera que él está cerca de las salchichas se inquieta, le molesta mucho porque ella misma decidió hace unos meses no comer carnes para evitar evitar el sufrimiento animal, pero especialmente se inquieta porque sabe que existe evidencia de grado A1 que comer embutidos de carnes está asociado al desarrollo del cáncer (Revista Médica de Chile, 148(11), 2020. Recuperado de https://scielo.conicyt.cl/pdf/rmc/v148n11/0717-6163-rmc-148-11-1697.pdf ).
Por suerte, Sandra y Miguel tienen una buena comunicación se han sentado a conversar sobre este asunto. Miguel comenta que para él es infinitamente mejor ver a su hijo feliz que negarle las salchichas, Sandra dice que es mejor negárselas que verlo con cáncer en el futuro.
- Pero no es todos los días, a veces un completo, unas salchipapas o su plato favorito con fideos y salsa.
- Es que te fijas? ya no es una vez, son varias en la semana y es mucha sal, muchas cosas que ni sabemos qué son. Hasta en los Simpson salía que le ponían zapatos y colas de ratón.
- Ya, pero sabemos que no tiene zapatos
- No estaría tan segura.
La conversación siempre estuvo en torno a los beneficios o los perjuicios que pudiera tener este tipo de alimento y todo marchaba bien hasta que Sandra mencionó que podrían sólo comer basados en plantas.
- Ah, no, tú estás loca! cómo se te ocurre! se necesita la proteína de la carne, sobretodo porque está en crecimiento!
Miguel traspasó el límite y le etiquetó como "loca". dejaron de hablar de lo importante para Raúl y se focalizaron en el conflicto.
- Es que para ti es más fácil fideos con salchichas, porque eres incapaz de pensar en otra cosa, o es algo rápido o no, incapaz de darle lo que Raulito necesita, sólo piensas en tí. Cómo se te ocurre darle chaparritas de desayuno!
- ¿Chaparritas de desayuno? No, jamás!
- Cómo que no? si el niño me dijo.
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